VIAJE A BUADAPEST "La esperada 2ª Parte"

Bueno, por fin me he decidido a contaros el resto del viaje a Budapest ahora que tengo más fotos para poder elegir. En el aeropuerto, como podéis ver nos encontramos a Rafa Nadal e Isra no pudo resistirse a hacerse una foto con él para colgarla en el blog (vamos a tener que hacer una sección de amigos tiberos), llegamos a Budapest a eso de las 19:00 aunque allí parecía mucho más tarde por la oscuridad, la niebla y el frío. Teniendo en cuenta que durante el vuelo nuestros amigos de Air Europa no nos dieron de comer es lógico que en cuanto vimos el cartel del Mc Donalds a las 20 de la tarde nos entrara una emoción descomunal por comernos unas hamburguesillas. Al mañana siguiente, misteriosamente desapareció la niebla pero no el frío así que pudimos disfrutar de las vistas desde lo alto del barrio de Buda, recorrimos toda la zona a pie para ver cada rincón de esta maravilloso barrio (castillo real, iglesias, una especie de muralla mu chula). Como en estas fechas anochece muy pronto, a las 5 de la tarde parece que estás paseando en plena noche, así que la tarde la dedicamos a pasear por la zona de Pest y merodear por el parlamento y los alrededores de la catedral (mientras Isra no paraba de martillear el parlamento con su cámara desde todos los angulos posibles). Lo cierto es que durante todo el día no vimos mucha gente en la calle, tan solo turistas italianos por todos lados.

A la mañana siguiente nos abrigamos mucho como podeis vernos en la foto, había mucha niebla y hacía muchiiisssssimo frío. Así que nos llegamos a una zona de la ciudad donde se encontraban varios museos y un parque enorme donde según explica la guía los hungaros van a retozar en otoño. Nosotros no vimos a ningún valiente que con la que estaba cayendo tuviera ganas de retozar, pero pudimos ver donde se encontraban todos los hungaros que no habíamos visto antes; en la pista de hielo patinando. Recorrimos el parque para acercarnos a un palacete medieval como los de los cuentos , nos hicimos unas fotejos y tocamos la pluma de Anonymus según manda la tradición para que nos inspirara en los futuros best seller que nos quedan por escribir; y descubrimos unos baños termales, en los que atención a la foto de más abajo (uuuhhhhhhhhhhh un hungaro en bañador a lo tarzan, lástima no llevar bañador) estaban todos bañandose al aire libre como si fuera verano. La verdad es que con todo el vapor no se ve mucho, mejor ampliar la foto.

El resto del día lo pasamos recorriendo el barrio de Pest de nuevo ya que para nuestra desilusión no pudimos entrar al parlamento porque lo habían cerrado, no sabemos si por la navidad o por las manifestaciones que hubo hará unos meses, claro que a ver quién era la guapa (en este caso yo que soy la única que habla con desconocidos en los viajes) que le preguntaba al señor guardia de la ametralladora algo. Así que paseamos por la calle de las compras, visitamos un mercadillo y nos comimos unas salchichas en uno de los puestos, lo que no impidió que luego nos dieramos una buena cena homenaje por todo lo alto. Al día siguiente, nos quedaba poco por ver, tan solo una subidita a un mirador con muchas escaleras de esas que a mí tanto me gustan. Los que habéis venido de viaje conmigo lo sabéis, en el primer tramo llevo al tío del mazo ya subido y acabo siendo el farolillo rojo. Pero esta vez, cuando ya estabamos arriba no me pareció para tanto, claro que después del preikestolen una ya ha cogido forma. Bueno pues lo que sigue ya os lo podéis imaginar, corre que te corre al hotel a por la maleta, corre al aeropuerto y vuélvete para Madrid. Adiossssss Budapest fue bonito mientras duró. Próximo destino Dublín......